(me repito a mi misma...)
Pero estas raíces se ensanchan bajo mis pies
y mi andar se vuelve pesado y sin rumbo.
Mi cuerpo se encoje viendo los años retroceder.
Con ojos de niña veo cada pared escrita
y me aferro a cada puerta... cada ventana.
Un sinsabor de claustrofobia me inunda.
Esta casa me vio caer para volverme
a levantar una y otra vez.
Desearía ser más libre y dejar que las estrellas
velen por mi, pero la sensación de pertenencia
se escapa de mis manos en habitaciones extrañas.
Las cosas a mi alrededor, no me definen...
Este es mi momento
ahora aquí
adiós ayer...
José Padilla
6 comentarios:
Desearía ser más libre y dejar que las estrellas
velen por mi, pero la sensación de pertenencia
se escapa de mis manos en habitaciones extrañas.
Me gusto especiamente esa parte del texto.
Saludos.
siempre pensé que los árboles son los indicador más claros, pues aferran fuerte sus raíces, pero sus ramas no dejan de crecer hacia el cielo
^^
te quiero lali!
puf... desde junio lali... desde junio...
seguimos... seguimos... que nos ha pasado?
opa! que versos!!
(y no nunca nos definen .. en fin, ni nosotros podríamos definirnos de una vez, porque como dice Galeano "la identidad no está quieta en los museos")
buen año!
me encantó. =)
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